Sus viajes no eran en autobús, mucho menos en tranvía,
el extendía sus alas y volaba,
el pertenecía al mundo de las hadas
y cuando volaba no era para buscar pareja,
era para dar paz, felicidad a quien la requiriera.
Así conoció a muchas haditas,
ellas cansadas de volar se sentaban a descansar
mientras que el les mostraba mapas de lugares
a donde podrían viajar,
cuando ellas emprendían el vuelo no lo hacían muy lejos,
siempre regresaban a el para que les diera consejos,
así fue transcurriendo el tiempo y todo marchaba normal
hasta que una mañana mientras el meditaba
guió su mirada hacia un árbol en especifico,
le pareció el lugar perfecto para construir un castillo
y sin perder tiempo tomo hojas de arboles vecinos,
ramas del suelo y se puso a construirlo.
Después de haberlo hecho se quedo sentado observando,
el silencio reinaba en el lugar por ser de madrugada
y escucho el llanto de un hada,
decidió averiguar y ahí estaba ella,
era una hadita de corta edad con sus alitas heridas,
el se sentó a observarla, ella no le quitaba la mirada
y decidieron intercambiar palabras,
El le pregunto como te llamas?
ella le contesto y le formulo la misma pregunta,
el le dijo que era tarde para andar en el bosque,
ella le dijo que le gustaba viajar de noche,
que edad tienes pregunto el?
Ella le mintió para parecerle mas grande
y este no llegase a rechazarle.
El le pregunto por que tus alitas maltratadas?
ella contesto que por haber confiado
sentimientos a un ser equivocado,
desde esa noche se hicieron buenos amigos
sin imaginar que desde esa noche sus destinos
ya no serian los mismos...
Pasaron los días, las semanas y los meces
y continuaban juntos, el la respetaba mucho,
ella por su corta edad escuchaba de el consejos,
el se los daba con gusto y sabiendo que
algún día ella volaría lejos empapada de ellos.
Aunque pertenecían al mundo de las hadas,
cuando estaban juntos ellos dos no volaban,
se sentaban a mirarse mutuamente,
caminaban por el bosque y todo les parecía increíble,
ella en realidad no tenia sus alitas destrozadas,
ya no quería volar, se quedaba en compañía
de aquel hado a quien ella aprendió a amar.
En varias ocasiones el le pidió volar a nuevos horizontes,
ella se negaba a hacerlo preguntándole ''ya no me quieres''?
el le amaba intensamente, y tenia miedo a perderle,
pero se daba cuenta que ella era mucho mas joven
y eso le bajaba posibilidades ante mas contrincantes,
ella le dijo varias veces, es a ti a quien mi amor pertenece,
el se sentía muy halagado y se imaginaba por siempre de su lado.
Al pasar del tiempo el quedo atrapado,
algún mal le impedía volar y el lo sabia, mientras que ella
con sus alitas curadas y llena de vida
se paseaba por el bosque como si nada,
cuando a el regresaba lo invitaba a volar,
el no podía hacerlo pero ella no debería saberlo,
le inventaba miles de pretextos y ella solo
se limitaba a esperarlo sentadita en el suelo,
o en las ramas de aquel árbol, el no podía ser injusto
y una ves mas le pidió emprender el vuelo sin el,
ella lloro y le dijo que eso jamas iba a hacer,
aunque tu te vallas de mi yo siempre te esperare.
El mal que a el le impedía volar no era físico,
era un maleficio, el había sido marcado en aquel
bosque de donde llego, el maleficio consistía
en que en cierto tiempo ellos ya no deberían de
emprender mas vuelos pues podrían perder sus destellos
y al quedarse sin ellos, un vuelo podría ser el ultimo,
de la nada les aparecía una marca en una de sus alas,
al alcanzar cierta altura esta se activaba y sus destellos
quitaba, el tiempo que deberían de estar en tierra
era indefinido por eso construyo un castillo en este bosque nuevo,
sabia que ya no debía emprender el vuelo,
y de hacerlo, podría ser el ultimo,
antes de que ella sufriera mas y el ya no encontrara
pretextos para no volar, le hablo con la verdad,
le dijo que el no podría ir con ella a donde ella quería,
el le explico las cosas y ninguno de los dos podía hacer nada,
ella no podía esperar mas, y el sin poder volar.
Eran noches muy tristes cuando ella venia a visitarle
y el la miraba en las ramas de aquel árbol inalcanzable,
durante varias noches el pensó en los riesgos que correría
si decidía volar junto con aquella hadita,
estaba decidido a hacerlo, estaba decidiéndose a
enfrentarse a todo por volar junto con su amor,
abandonaría el castillo que construyo
y los dos juntos construirían uno nuevo,
cuando estaba decidido a hacerlo pensó en decírselo,
esa noche ella no llego a visitarlo y el se quedo desconcertado,
a la noche siguiente tampoco llego a verle y el se puso triste,
imagino que había pasado lo que el le pidió siempre,
que emprendiera el vuelo sin el...
Ella llego noches después y lo hizo con coraje,
decidida a enfrentarle y a decirle el por que no había
ido a visitarle:
Me canse de esperarte, ya que no quieres irte de tu bosque
encontré a quien me acompañara a emprender un viaje,
ese viaje que siempre quise hacer contigo y por lo que halla
sido jamas fuste valiente para vivirlo conmigo,
de ti hoy me despido, hagas lo que hagas ya no
te esperare mas, hagas lo que hagas no me harás regresar.
El se quedo llorando amargamente, cerro todas las ventanas
y puertas de su castillo para que nadie llegase a interrumpirlo,
quería desangrarse de dolor y lo estaba logrando,
una noche al quedarse dormido ella se metió en su sueño
y le pidió no hacerse daño, debes de salir adelante,
debes de levantarte y emprender un nuevo camino,
ya que no puedes volar por ahora,
sigue haciendo buenas obras con otras haditas,
búscalas, busca a quienes dejaste cuando a mi me encontraste,
escoge a una de ellas y se feliz, yo igual quiero ser feliz
y lo estoy haciendo sin ti.
El no hizo caso de ese sueño, pero si seco su llanto
y abrió puertas y ventanas de su castillo,
por varias noches le dio por escribir un libro
y al pasar de los meces su alma ya no dolía tanto,
pero el recuerdo de ella seguía vivo.
Escribió varias hojas de aquel libro y una noche lluviosa
se avecinaba una tormenta, el corrió a cerrar las ventanas
pero basto una sola para que varias hojas del libro salieran,
el las vio volar con aquel viento inmenso y sin
poder hacer nada la lluvia se confundía con sus lagrimas,
el pensaba que ahí estaba su historia con ella y no debería de quedar
incompleta, a la mañana siguiente vio que a su libro
le faltaban varias hojas y se puso a redactarlas nuevamente
pero le fue imposible inspirarse y termino por agotarse.
Una noche de la nada vio llegar una de sus hojas,
esta se poso sobre su ventana como si el mismo
viento se la entregara, al leerla sus ojos se llenaron
de lagrimas, en ella redacto uno de sus tantos sueños
con ella y los recuerdos lo hicieron llorar,
no la podía olvidar y se dio cuenta que a nadie mas
podría algún día mas amar...
Decidió seguir ayudando a mas haditas de aquel bosque
y se repetía a si mismo jamas la olvidare,
aunque jamas regreses, yo por siempre te esperare...
Su libro quedo incompleto, le faltan varias hojas
y el final, quiso inspirarse en alguien mas,
redactar y poner punto final a esa historia con ella,
pero no lo logro y bien sabe que no lo lograra,
nadie podrá ocupar su lugar,
tengo un libro incompleto y para terminarlo
debe de ser inspirado por el ser indicado,
así pasen decenas de años, voy a esperar
a mi ser amado y terminare mi libro,
si no regresa ella, ese libro morirá junto conmigo.
El maleficio esta terminando y pronto el podrá irse volando,
quizás sera muy tarde ya para buscar a su amor
del pasado, pero tiene la esperanza de verla una ves mas,
de abrazarla, de entregarle confianza, de perderse en su mirada
simplemente el quiere ver una ves mas a su hadita,
a esa hadita que es el gran amor de su vida,
a ella a la que pasa y pasa el tiempo y no la olvida...
1 comentario :
Hey! Me recuerdad aún? :)
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